Seguido a la publicación del comunicado del comunicado del Gabinete Real dando a conocer el contenido dirigido a su majestad El REY, que Dios le bendiga, por el Presidente del Gobierno Español y en la cual este ultimo, afirmó que “ España considera que la iniciativa marroquí de autonomía es la base de una de las medidas mas serias, realistas y creíbles para la resolución del altercado” sobre el Sahara Marroquí.
Con el nuevo posicionamiento español, conociendo la historia del país y su incomodidad sobre el asunto del Sahara Marroquí, el Reino de Marruecos, bajo el impecable y sabio liderazgo del REY, que Dios le bendiga, recoge la cosecha obtenida de sus posiciones bien pensadas, responsables y asumidas.
Por consiguiente sería oportuno aludir ciertos discursos pronunciados por el Soberano en el mes de agosto, por la ocasión de la Marcha Verde.
Algunos pretenden que Marruecos está siendo asaltado por haber cambiado su orientación política y estratégica, así como su modo de operación en cuanto a ciertas cuestiones diplomáticas.
No hay nada de eso. Marruecos ha cambiado, efectivamente, pero no en el sentido en el que lo desean sus críticos. Ha cambiado porque no acepta que sus intereses superiores sean abusados. Correlativamente, pretende crear relaciones sólidas, constructivas y armoniosas, obviamente con los países vecinos.
Esta es la lógica que guía nuestras decisiones en las relaciones entabladas actualmente con nuestro país vecino, España.
Cierto es, que tales relaciones han pasado por momentos de crisis precedentes que han puesto en peligro la confianza mutua y ha creado varias interrogaciones sobre el porvenir de estas.
Sin embrago, hemos trabajado con la parte española, en un ambiente de calma, claridad y un espíritu de responsabilidad.
En efecto, hoy en día tenemos la intención sincera de reforzar los fundamentos clásicos que están por debajo de estas relaciones, a favor de una compresión conjunta de los intereses de nuestros dos países vecinos.
De hecho, he seguido personalmente y directamente el proceso de diálogo al igual que la evolución de las discusiones.
El objetivo no era solamente encontrar un resultado a esta crisis, pero también intentar crear una oportunidad para redefinir las bases y los parámetros que ponen en marcha estas relaciones.
Con un gran optimismo, deseamos continuar obrando con el gobierno español y su presidente, Su Excelencia Pedro Sánchez, con el fin de inaugurar una etapa inédita dentro de las relaciones de nuestros dos países. De ahora en adelante, estas deberán establecerse sobre la confianza, la transparencia, la consideración mutua y el respeto de los compromisos.”
Valoramos el ver cómo crecen y se amplifica el apoyo estable en la que goza nuestra causa justa. En cuanto a ello, la decisión del soberano de los Estados Unidos de América de reconocer la plena y entera soberanía del Marruecos sobre su Sahara constituye una razón de orgullo para nosotros. Es el corolario natural de la person contante de las administraciones americanas anteriores y el notable aporte constructivo al proceso de arreglo de la cuestión del Sahara.
Esta orientación afirma el carácter irreversible el proceso político en marcha: esta dedicado a llevar a acabo una solución definitiva fundada sobre la iniciativa de autonomía y soberana marroquí. Por consecuente la decisión de más de veinticuatro países de abrir sus consulados en Laayoune o en Dakhla confirman el gran numeroso apoyo del que se beneficia la posición marroquí, sobretodo en el seno del ambiente Afro-Árabe de nuestro país.”
España, al hacer vocal este anuncio por sus altas autoridades, marca su posición de la manera más clara posible y se alega la postura más avanzada a nivel europeo.
Teniendo en cuenta el rol inminentemente histórico de España dentro de la cuestión del Sahara, la voz mas competente, a expresado en el mensaje dirigido a su Majestad el REY, que Dios le bendiga, por el presidente del gobierno español toma una consonancia profunda y particular.
El anuncio de la nueva posición española se inscribe en el cuadro de un Momentum en el que los Estados Unidos reconocieron la soberanía plena y entra de Marruecos sobre su Sahara, así como todo país la Liga Árabe, los Estados del Golfo, pretenden abrir de más de una veintena de consulados en las ciudades de Laayoune y Dakhla.
Conviene enfatizar que también la evolución de Alemania, cuyo presidente había, en un mensaje dirigido al Soberano, afirmando que su país “considera el plan marroquí de autonomía presentado en 2007 como un esfuerzo serio y creíble de Marruecos y como una buena base para el porvenir de un acuerdo” a esta controversia.
Esta nueva postura española, que es inequívoca en cuanto a su significación histórica y geoestratégica, constituye un fracaso para Argelia y su creación, el frente polisario, que consideraba España como su zona de confort psicológico. Argelia y polisario cada vez están más aislados.
La nueva posición que ha tomado España, muestra cómo los críticos de Marruecos, que no dudaban en opinar sobre la posición firme e intransigente, de un Marruecos seguro de sí mismo y justo, según sus socios europeos, se han confundido estrepitosamente