Suena la canción My Way de Calvin Harris. Escenografía cuidada y orquestada. Luces bajas. Pulseras al aire en muñeca izquierda encendiéndose y apagándose como si fuera un latido. Aparece Pedro Sánchez. Apenas pisa el recinto, una fiel se desgañita desde la tribuna: « ¡Pedro, sé fuerte! ». Otra vez el « sé fuerte » en la vida política. Sánchez, en un discurso en el que ha seguido la estrategia de este cónclave de presentar al partido y el Gobierno como víctimas de ataques de la derecha e, incluso, de los jueces, ha aprovechado el foco de un congreso de partido para realizar un gran anuncio de Gobierno: creará una gran empresa pública de vivienda, « capaz de construir y gestionar vivienda desde la administración general del Estado ».